Viaje final del Erasmus de Groningen

Bueno mis niños, en este post quiero rememorar lo genial que fue nuestro último viaje juntos, empezando por la odisea que fue ponernos de acuerdo y al fin cerrar un itinerario 😂

Sofía y Plovdiv

En estos días de Abril que el tiempo está loco y no sabes si un día vas a necesitar abrigo o si va a hacer sol como en agosto echo mucho de menos el calor del verano pero al pensar en Sofía y sobretodo en Plovdiv se me quitan las ganas 😂 Real que recuerdo la caminata hasta el teatro romano como una expedición por el desierto. Y el sol que pegaba en ese teatro era digno del Sahara. Pero es cierto que mereció la pena y creo que a todos tanto Sofía como Plovdiv nos dejaron bastante sorprendidos.

Sofía, con aquel maravilloso freetour con hambre y resaca en el cual la guía acabó cantándonos en búlgaro y el fantástico Happy, del que fuimos fieles clientes, las litronas y el tabaco ultra baratos y el momentazo de la creación del reaggeton del grupo por Irati y Lu gracias al iPad que Ana se llevó consigo a lo largo del viaje con la finalidad de estudiar 😂Aquel mercado gigante en el que te podías perder, el intento frustrado de ir al pub de al lado de casa (sad story), el momento histeria por las cucarachas del airbnb y lo resfriada que estuvo Aída también merecen ser recordados.

De Plovdiv (a parte del calorrrr que vivimos y del teatro romano) me quedo con lo bonitas que estaban las callejuelas con los banderines, la música y los puestitos que nos encontramos por casualidad. Y como no, también recuerdo el carísimo mojito en bolsa que pagamos con las ultimas levas que nos quedaban 😂

Bucarest y alrededores

Bueno para hablar de Bucarest hay que empezar hablando de la noche en el bus en el cual Alberto y Ana decidieron que era una buena idea dormir en una especie de maletero con un colchón y recordar el momento en el que el propio conductor les despertó 😂 Llegamos a Bucarest suuuper pronto por la mañana por lo que no había ni peter abierto y acabamos desayunando en una cafetería que probablemente sería de lo más caro que podíamos encontrar pero necesitabamos un sitio en el que caernos muertos hasta poder ir al airbnb.

Llegamos al airbnb y todos maravillados con lo céntrico que estaba, lo grande que era bueno todo maravilloso (luego descubriríamos el porqué era tan barato) fuimos a hacer otro freetour de los que tanto nos gustan al solet (de verdad que no sé vosotros pero recuerdo todo el viaje con muchísimo calor 😂) y luego a ver el parlamento y a tomar algo en la galería aquella. La verdad que Bucarest también me sorprendió bastante, es cierto que da para un día y poco pero merece la pena visitarla.

 

Llegamos después de tomar algo al airbnb y vaaaaaaaya, los pobres que dormían en la habitación grande tenían una discoteca montada en el cuarto por los pubs de la calle y los que dormíamos en la pequeña teníamos el sáhara metido en una habitación. Una maravilla de noche 😂

Al día siguiente cogimos los coches que habíamos alquilado en dirección a dos castillos para ver los alrededores de Bucarest. Tras pensar que jamás encontraríamos el dichoso castillo de Drácula conseguimos llegar y confirmar lo que nos habían dicho, que era un chustón. Pero el paseo en coche por las montañas de un verde super bonito mereció la pena. Además, qué bien nos lo pasamos comiendo en el césped ese con el perrillo que nos seguía.

Segundo castillo, vemos que empieza a llover, todos en topa de verano obviamente por lo que empieza la caminata hasta el castillo bien de mojados. Y bueno, lo que nos gusta a nosotros unas fotitos en cualquier sitio.

 

Budapest

Madrugamos y prontito cogemos el avión a Budapest. En este viaje fue cuando me enamoré de la ciudad y fue en parte por los momentos que viví allí con vosotros.

El airbnb sin duda de los mejores en los que he estado, adjunto house tour de esa maravilla.

Allí tuvimos una nueva incorporación al equipo, la veci María 💖 Salimos a dar una vuelta por la ciudad, a comer y tomarnos una merecida cerveza en el parque y como no, a hacernos más fotitos 😂

Después tomamos algo en una terraza bastante mona que ofrecía deliciosos gin-tonic con pepino 😂

Al siguiente día wow otro amazing freetour, de éste recuerdo el hambre que tenía, lo eterno que se me hizo y el calor que pasé subiendo las escaleras hacia Buda. De cualquier manera nos sirvió para tener una idea general de lo que era la ciudad y para darnos cuenta de lo bonita que era. Comimos en Buda al finalizar el tour y vuelta al Bastión de los pescadores, que tocaba sesión de fotos (mira que somos pesados... pero que bonitas quedaron 😍)

De hecho, de ese momento es la foto que tengo de cabecera e icono del blog. Foto que fue posible gracias a la amiga de Irati a la cual se la copiamos y a Erika, autora de muchas de las fotos de este viaje (gracias tía tk💖).

El Bastión de los pescadores me parece el sitio más bonito de Budapest, ver el anochecer desde ahí arriba, la ciudad entera iluminada... sencillamente precioso. Puede ser que tenga muy buen recuerdo de él por aquel momento tan especial que solo nosotros entendemos, mira que yo no había soltado una lágrima pensando en que llegaba el final pero por vuestra culpa y más concretamente por la de Alberto, me acabé sumando al momento tan bonito y a la vez dramático que montamos ahí arriba con Budapest iluminado, un violín sonando de fondo y nosotros más sentimentales imposible.

  

Para animar un poco la cosa decidimos comprar alcohol y beber en el piso para salir esa noche (no recuerdo si todos decidimos beber vino con el limón ese concentrado o hubo algún listo que se salvó pero que valientes fuimos bebiendo eso, con kilos y kilos de azúcar eso sí 😂). Así descubrimos Instant, recuerdo esa noche con mucho cariño ya que creo que hablo por todos cuando digo que no nos lo pudimos pasar mejor y eso que no era el tipo de música preferida por todos pero fue una noche inmejorable.

Al día siguiente fuimos a las termas, parada obligatoria en Budapest. Nos vino genial para relajarnos y descansar, aunque lo mejor de ese sitio es claramente la piscina del remolino cual Arenal Sound pero bastante más limpio 😂

Ese mismo día a las 4 de la mañana tuvimos que coger los taxis al aeropuerto ya que nuestro vuelo salía muy temprano y mira, no recuerdo ninguna experiencia en un aeropuerto más angustiosa que la de ese día. Llegamos, una cola increíblemente larga para hacer el check-in, ya que WizzAir había decidido que era buena idea no habilitar el online. Los minutos pasando y nuestro vuelo cada vez más arriba de la pantalla de próximas salidas. Nuestro vuelo desaparece de la pantalla. HISTERIA. Al fin llegamos al mostrador y gracias al señor la azafata llama a saber a quién y de dos en dos según facturamos salimos corriendo a la otra punta del aeropuerto de Budapest, ya que la zona de embarque de las compañías low cost no podía estar en ninguna otra parte más lejos. Llegamos a coger el vuelo pues mira no sé, porque el destino nos sonrió porque yo ya me veía pagando otro 🤦🏼‍♀ A todo esto en mitad del ataque de nervios todavía estabais algunos (Alberto el principal cabecilla) con el cachondeito cantando y yo os juro que si Irati y yo no os matamos fue porque llegamos al mostrador antes de que sucediera 😂 pero os quiero mucho de todos modos 💖

No podía faltar en este post el video resumen de nuestro Erasmus que hizo Martita.

Y así termino este resumen de nuestro último viaje familia. Recuerdo todo con mucho cariño y a vosotros os recuerdo siempre, pase el tiempo que pase. Me hicisteis muy feliz todos y cada uno de los días de mi Erasmus chicos, espero teneros alegrándome la vida por muchos años más. 

Las coordenadas que llevo tatuadas son casa, esté donde esté y estéis donde estéis. 

Os quiero mucho gordis 💖